Algunas cementeras aseguran que todo su catálogo de productos ha visto reducida sus emisiones contaminantes en relación con años anteriores y productos convencionales. Varias coinciden que al 2050 serán carbono neutral.
Con el objetivo de apegarse a la sustentabilidad en la industria del cemento, varias empresas del rubro han adoptado ciertas medidas y productos verdes que bien vale destacar. Así, apuntando a la reducción de emisiones de carbono, Cementos Argos, por ejemplo, cuenta con stock de productos verdes que, en palabras de la cementera, representan un 18 % de su portafolio actual.
Los cementos verdes de Argos tienen un 35 % de reducción en emisiones de CO2 comparados con el cemento Portland tradicional y es producido en las plantas Rio Claro y Sogamoso en Colombia y en la planta de Piedras Azules en Honduras.
“Somos conscientes de los retos que plantea la sostenibilidad en el campo de la construcción y lo exigente que es elegir los materiales y servicios adecuados. Para facilitar esta labor, hemos seleccionado los productos que, por su diseño, producción y desempeño, sobresalen en la contribución a la adaptación al cambio climático y la economía circular”, explicó María Isabel Echeverri, vicepresidenta legal y de sostenibilidad de Cementos Argos.
Mirando también la reducción de emisiones, la cementera colombiana está trabajando en el uso de arcillas calcinadas y combustibles alternativos, con lo que, según la compañía, en 2020 significó una sustitución de un 6.2 % en el consumo calórico de combustibles, reduciendo así las emisiones. Al mismo tiempo, en 2020 Argos aumentó en 50% su flota de vehículos eléctricos o a gas y además incursionó en la captura de CO2 con microalgas en su planta en Cartagena, al norte de Colombia.
En tanto, Holcim Colombia, filial de la francesa LafargeHolcim, ha apostado por el sistema de Ecoetiquetas en sus sacos de cemento. “Cada sello especifica esa reducción en CO2, comparado con un OPC (cemento Portland ordinario). Para el caso del cemento Boyacá Súper Fuerte, el de mayor demanda del mercado colombiano es de 40 % y que alcanza un 50 % para el caso del Cemento Maestro para mampostería”, comentó Marco Maccarelli, Presidente Ejecutivo de Holcim Colombia.
Hay que recordar que, a finales del año pasado, la cementera franco-colombiana introdujo el ECOPact, una línea de concreto desarrollada con una reducción entre un 30-50 % de emisiones de CO2 en comparación con el cemento convencional. Mientras que cuentan con los productos ECOPact Prime que alcanza niveles de reducción de hasta un 70 %, según comentaron desde la compañía. Incluso, señalan, hay un ECOPact Max que supera el 70 % en reducción de emisiones. Al respecto, Maccarelli, enfatizó en que cerca un 40 % de su portafolio tiene una ligación con las bajas emisiones.
Los mexicanos Cemex, por su parte, también cuentan con una oferta que apunta a la reducción de emisiones contaminantes. Bajo el alero de su línea de productos Vertua, en 2020 lanzaron un producto cementero que reduce y compensa emisiones, entre un 30, hasta casi un 100 %. Cabe recordar que desde el propio Cemex, anunciaron que todos los cementos de uso general y estructural cuentan con al menos con un 15 % de reducción de emisiones, respecto a cementos convencionales.
Desde la cementera mexicana destacan que el 96 % del cemento que producen cuenta con algún tipo de reducción de emisiones. Además, sostienen que en los últimos meses, el 45% del cemento vendido han sido de la línea Vertua. En particular, este tipo de cemento para lograr su baja huella está combinado con ciertos compuestos minerales.
A la vez, Cemex también trabaja en otras estrategias para reducir emisiones, ya que lamentan que un 20 % del combustible utilizado para echar a andar sus hornos, provienen de residuos agrícolas o del sector de generación de energía. Otro desafío, es que en línea con el Acuerdo de París, Cemex quiere reducir sus emisiones netas en un 35 % en 2030 y ser carbono neutral al 2050; al igual que se lo ha propuesto Argos, que busca disminuir en un 29 % sus emisiones netas hacia 2030 y también quiere ser neutral para el 50.
Fuente: Construcción Latinoamericana