Toda obra de construcción no solo debe buscar la productividad, la minimización de plazos y costos y la optimización de los materiales. También es fundamental garantizar la seguridad, más aún si se emplean equipos como las grúas torre, las cuales generan enormes ventajas para los proyectos siempre y cuando se tomen todas las medidas necesarias para que se pueda realizar el montaje y operaciones seguras.
Las grúas torre son, sin duda alguna, equipos que permiten que los procesos constructivos en una obra se ejecuten de manera rápida y segura. Es por ello muy común ver este tipo de grúas presente en diversos proyectos de construcción, desde edificaciones hasta obras de infraestructura.
Su gran versatilidad, su facilidad de cargar y transportar rápidamente elementos pesados necesarios para la obra, generan eficiencia y contribuyen a la productividad en el proyecto. Además, a diferencia de otro tipo de grúas, la grúa torre tiene la ventaja de poder llegar a mayor longitud y poder realizar 3 maniobras a la vez: elevar, girar y trasladar
Sin embargo, para poder disponer de estas ventajas que concede el empleo de la grúa torre, primero será necesario tomar en cuenta algunos criterios de seguridad con el fin de evitar accidentes. Eludir esta tarea puede, incluso, ser la causa de resultados fatales.
Lo primero que se debe asegurar es que la grúa torre cuente con una certificación de operatividad que indique que se han cumplido con los procedimientos de montaje según el manual y las normas de seguridad. Así lo señala Carlos Villacorta, gerente general de Grúas ETAC Perú, quien subraya que esta verificación preferiblemente lo debe realizar una empresa tercera para “no ser juez y parte”.
Asimismo, refiere que el operador también debería estar homologado con certificación de conocimiento y operatividad, lo cual debería ser garantizado por un tercero especialista y autorizado para brindar estas certificaciones.
“En nuestro caso, además de estos puntos, contamos con una app móvil llamado Mobile Report, que nos permite hacer una verificación en línea de un check list de las principales funciones
de las grúas, verificar los mantenimientos realizados, además de informar en línea de observaciones o posibles problemas detectados para atenderse en los mantenimientos preventivos o predictivos que realizamos según cronograma de mantenimientos”, añade.
La empresa Agrumaq, distribuidora exclusiva de grúas torre Liebherr para los sectores Construcción, Minería e Infraestructura en el Perú, subraya también la importancia de realizar la comprobación de todas las medidas de seguridad necesarias. Esto con el fin de que no existan interferencias en las zonas del tráfico de cargas.
El viento: factor clave para una operación sin inconvenientes
De acuerdo con Agrumaq, el enemigo mayor de las grúas torre es el viento, ya que este puede generar el vuelco de las mismas. Por ello, advierte que si la velocidad del viento supera los 12.50 m/s o 45 km/h, entonces se deben detener las labores de instalación de la grúa torre, pues hay altas probabilidades de que surjan accidentes ya que la grúa puede caerse.
Sin embargo, antes de que se instale el equipo, Agrumaq resalta que se debe verificar de que no existan obstáculos alrededor de la zona de montaje, con el fin de que la grúa pueda disponer del giro libre los 360°.
De lo contrario, no debe montarse la grúa hasta superar estas dificultades.
“En los manuales de instalación y operación de todos los fabricantes se recoge que las grúas torre, posterior a la jornada laboral, deben quedar en posición de veleta, es decir, con el freno de giro liberado y con la libertad de girar hacia donde el viento sople”, añade.
Pero, el viento no solo se toma en cuenta antes del montado de la grúa torre. También debe evaluarse durante la operación del equipo.
Agrumaq resalta que, si en este caso, la velocidad del viento es superior a los 13.8 m/s o los 50 km/h, las labores de la grúa torre deben detenerse de inmediato.
Otros factores importantes para una correcta instalación y operación
El gerente general de Grúas ETAC Perú resalta que es esencial validar la resistencia del suelo donde se va a montar la grúa torre y la capacidad portante según el modelo de grúa. Igualmente, destaca que se debe
determinar el tipo de apoyo: puede empotrarse con pies sobre una zapata, sobre un chasis o incluso puede estar sobre rieles con un sistema de traslación. Esto ayudará a determinar adecuadamente los trabajos previos antes del montaje.
La verticalidad de la grúa debe ser validada por un topógrafo. Villacorta argumenta que esta tarea puntual debe realizarse previo al montaje del basal, con el fin de que el equipo tenga la verticalidad adecuada y se eviten desviaciones en el montaje de la grúa.
Los accesos para el posicionamiento de la grúa móvil que se usarán en el montaje y desmontaje, de igual manera, deber ser verificados y estar en las condiciones adecuadas. El representante de Grúas ETAC Perú subraya que se debe asegurar de que no existan interferencias, como cables de alta tensión, torres de comunicación, árboles, estructuras o edificios, durante el proceso de montaje y, con mayor razón, durante la operación de la grúa torre.
Por su parte, Agrumaq señala que todas las escaleras, plataformas, barandillas, manijas y otros accesorios de la grúa torre deben estar libres de impurezas u obstáculos que impidan su acceso. Esto con el finde que se pueda operar el equipo de la manera más segura y óptima.
Empero, si se presenta alguna incidencia, como la mala visibilidad o cualquier otro inconveniente por más minúsculo que parezca, la empresa advierte que la grúa torre no debe comenzar sus labores diarias hasta solucionar esta observación. De lo contrario, podría generarse la posibilidad de accidentes incluso fatales.
Asimismo, el operador debe asegurarse de que todos los dispositivos de protección y seguridad estén presentes y operativos (limitadores de carga, limitadores de par, limitadores de gancho, limitadores de traslación de carrito, etc.).
También es vital tomar en cuenta que la distancia de seguridad mínima entre el extremo de la pluma de la grúa torre y los elementos colindantes es de 1.50 metros; mientras la distancia de seguridad de las líneas conductoras de corriente, dependiendo de su potencia, oscila entre 1 y 9 metros.
Importancia del mantenimiento y la inspección
El uso debido de las grúas torre también debe incluir el respeto de las condiciones de mantenimiento y de inspección. El resultado será más que satisfactorio: una operación segura y productiva.
Ambas empresas coinciden en advertir que el no realizar los mantenimientos preventivos, respetando las fechas establecidas, amplía el riesgo de que se produzcan fallos del servicio, operaciones inadecuadas o, en el peor, de los casos, accidentes mortales.
Errores comunes en el montaje y la operación
Los principales errores que identifica Agrumaq en relación al montaje y la operación de las grúas torre son:
No respetar las normas del fabricante tanto para la instalación como para la operación.
No disponer del giro libre de los 360°, lo cual podría generar el impacto del equipo con los elementos colindantes o incluso el derribo de la misma.
Manejar las cargas sin tener control visual o rigger de la maniobra: realizar oscilaciones, balancear la carga o intentar elevar la carga diagonalmente; elevar cargas fijadas al suelo; superar el peso de las cargas especificadas por el fabricante; izar cargas mal estrobadas; y no tener en cuenta las líneas eléctricas colindantes.
Por su parte, el gerente general de Grúas ETAC Perú destaca que el primer error más común que se suele cometer es no cumplir con los procedimientos y normas de montaje según el manual.
“Esto es muy grave debido a que el colapso de una grúa torre es normalmente complejo por el tipo de equipo, pues genera pérdidas humanas y altos costos en reparaciones civiles”, explica.
En esa línea, anota que es clave que se conozca muy bien el proceso constructivo para definir la grúa ideal, la cual deberá brindarle a la obra la máxima productividad en los plazos establecidos.
“En ocasiones se opta por grúas pequeñas que demoran los trabajos o se tiene que reconfigurar los pesos de las prelosas, encofrados vigas etc., porque la grúa no cuenta con mayor
capacidad. Esto trae como consecuencia el atraso de la obra, al tener que hacer más maniobras extendiendo el costo de una planilla completa de obra, que es bastante mayor que el valor de una grúa más grande”, sostiene.
La errónea elección de la grúa torre puede generalizar la paralización total de una obra y con ello, el equipo se mantendría sin operar, paralizado. Ello implica, según Villacorta, una pérdida que oscila entre los S/ 20 000 y S/50 000 por día, debido a que todo el proceso constructivo está realizado en base a la utilización de este equipo.
Otro error que menciona el vocero de Grúas ETAC Perú es no considerar un grupo electrógeno para alimentar la grúa. “En muchos casos las obras se confían de la red directa de energía eléctrica, la cual muchas veces presenta problemas y luego la constructora deberá alquilar un grupo electrógeno que no tenía contemplado”, refiere.
Todos estos errores cometidos tanto en el montaje como en la operación de las grúas torre pueden generar el vuelco o la caída del equipo, el desplome de la carga, el atrapamiento de personas entre la grúa y los elementos fijos (con partes de la grúa o con las propias cargas), caída de personas, y choques eléctricos.
Tecnología y seguridad
Las grúas torre de Agrumaq cuentan con dispositivos de seguridad y de conexión-desconexión que ayudan a ejecutar un montaje correcto y una operación satisfactoria.
En cuanto a sus dispositivos, la empresa destaca los limitadores. Los limitadores de movimiento o carga son muy importantes en el equipamiento eléctrico de la grúa. “La seguridad en el área de la grúa torre depende básicamente de estos limitadores; por eso es que siempre deben estar bien ajustados y debe asegurarse de que su funcionamiento es la manera más segura de la operación del equipo”, añade.
Los limitadores de sobrecarga están influenciados tanto por la carga suspendida como por la posición del carrito; cuanto más separado este el carrito de la torre, menos carga admite hasta que accione el limitador. Asimismo, los limitadores de revoluciones de la carga permiten una elevación de la carga segura sin la existencia de sobrecargas.
En relación a los dispositivos de conexión-desconexión, Agrumaq menciona el seccionador que va montado debajo del colector y que sirve para cortar la alimentación eléctrica; el interruptor general del armario, el cual permite la conexión y desconexión manual; el contactor general, como interruptor de la grúa; los dispositivos de parada de emergencia; el ABB (Límite de la zona de trabajo”, que es un dispositivo de protección presente en la grúas torre Liebherr que poseen los sistemas FR.TRONIC y LITRONIC; el sistema anticolisión “AKS”; el control del estado electrónico límite “EGZ”; el sistema de señalización electrónico “EMS” que indica la carga, altura y distancia del carro, ángulo de giro, profundidad de descenso y velocidad del viento; y el variador de frecuencia “FU”, el cual permite una elevación y descenso de la carga sin saltos ni tirones.
Por su lado, el gerente general de Grúas ETAC Perú asegura que las grúas torre de la empresa cuentan con diversos sistemas de seguridad y herramientas que ayudan al operador y personal de mantenimiento a evitar accidentes. Explica que las grúas que oferta la empresa vienen de fábrica con limitadores que previenen la ejecución de maniobras que no puede realizar el equipo.
También, indica que Grúas ETAC Perú cuenta con el Mobile Report, un sistema de telemetría, y un sistema de anticolisión, que previene posibles accidentes. “Constantemente estamos buscando el desarrollo de nuevas tecnologías que aporten a lograr nuestra filosofía de cero accidentes”, agrega.
Por último, señala que la empresa cuenta con un sistema de gestión que incluye la Trinorma (ISO 9001, ISO 45001 e ISO 14001) y que, gracias a “la experiencia de más de 44 años de operación en la región, tenemos procedimiento de cada tipo de mantenimiento y esto por rubros, debido a que las condiciones climáticas y de contaminación varían por sectores. El resultado es muy alentador al contar con un uptime de la flota por encima de 98 %”, puntualiza