Siempre presentes en las diferentes etapas de los proyectos mineros, los encofrados facilitan el desarrollo de los procesos constructivos de las estructuras necesarias para la actividad de la minería. Brindan eficiencia y productividad gracias a sus cualidades técnicas que los convierten en elementos primordiales en estos proyectos.
Los encofrados son uno de los elementos más usados en los proyectos de construcción de estructuras. Estos son moldes dentro de los cuales se vierte el concreto fresco para darle forma hasta que la mezcla tenga la fuerza suficiente para autosostenerse.
Son elementos primordiales en las etapas de construcción, ampliación y mantenimiento de las diversas estructuras que se tienen en un proyecto minero. Además, son estructuras firmes, fáciles de armar y desarmar para prestaciones puntuales, como la construcción de estructuras de gran tamaño.
Gracias a su empleo se pueden construir vigas y columnas en perfecto estado, pero también losas, voladizos y grandes estructuras demandantes de concreto que, en el caso de las operaciones mineras, se asocian a zonas de chancado y molienda, donde el tonelaje de los equipos requiere de bases muy sólidas para asegurar la correcta operatividad de los mismos y la continuidad de los procesos.
De acuerdo con Peri Peruana, empresa especializada en sistemas de encofrados y andamios, señala que construir las instalaciones de una operación minera depende de muchos equipos y soluciones que permitan ejecutar de forma eficiente y segura una obra. “Parte de las edificaciones que demanda este sector son de concreto, y para ello, se necesitan encofrados resistentes y seguros alienado a una buena ingeniería”, señala la empresa. “Peri ha desarrollado diferentes sistemas que se adaptan a la necesidad de la obra ya que son productos versátiles, resistentes, seguros y fácil de armar”, añade.
Por su parte, el ingeniero Alex Jiménez, gerente general de Jade Consulting, empresa especializada en encofrados y andamios, resalta la importancia de emplear encofrados industrializados en la construcción de estructuras de concreto armado de grandes dimensiones que permitirán el correcto desarrollo de un proyecto minero. Subraya que son garantía de seguridad y productividad en favor del proyecto.
“Más allá de los estándares y certificaciones con los que vienen acompañados, también por la seguridad técnica y al personal, el cual incluye en el uso de estos sistemas. Sin contar con estos sistemas industrializados, no podríamos realizar las estructuras de concreto armado con la productividad requerida”, señala.
La relevancia que tienen los encofrados en estos proyectos hacen necesario que cuenten con varias propiedades mecánicas, como la resistencia a la presión de vaciado, el acabado final de la superficie de concreto y la durabilidad. Además, deben permitir su traslado fácil a través de una grúa y deben ser muy versátiles, de tal manera que puedan ser utilizados en diferentes soluciones.
La versatilidad con la que cuentan permiten cubrir diferentes necesidades, garantizando la máxima rotación con el mínimo de equipos. Su facilidad de manipulación es otra cualidad que aporta a la productividad de la obra, ya que permite que el personal lo utilice de manera correcta sin necesidad de una capacitación.
Eligiendo el tipo de encofrado adecuado
La principal demanda de encofrados en proyectos mineros corresponde a la construcción de estructuras que implican la aplicación de concreto masivo, como en los chancadores, los molinos de bolas, los stock piles, los túneles de recuperación, entre otros.
En ese sentido, el Ing. Jiménez señala que el tipo de encofrado va a depender del tipo de estructura. “Nosotros como institución asesoramos a empresas a realizar una correcta elección de estos sistemas”, indica y añade que, tanto para estructuras verticales como horizontales, “es primordial conocer los diferentes sistemas de encofrado que existen y aplicarlos a cada etapa del proyecto”.
Los encofrados pueden clasificarse de diferentes maneras: según el material con el que están fabricados, según el sistema de transmisión de cargas, el sistema de ejecución, entre otros. No obstante, generalmente, suelen clasificarse en función de la posición del elemento que se va a encofrar, quedando así solo dos tipos de sistemas: horizontales y verticales.
El sistema de encofrados horizontales comúnmente es empleado en forjados de edificaciones o losas de puentes. Está constituido por 3 grupos de elementos: una superficie encofrante que da la textura y permite la transmisión de las cargas; una estructura horizontal formada por vigas, sopandas o correas que traslada las cargas de la superficie encofrante a la estructura vertical; y una estructura vertical, formada por puntales que transmite las cargas a los forjados inferiores o al terreno.
Asimismo, el sistema de encofrados verticales es usado en la ejecución de pilares y muros. Estos, según el modo de transmisión de los esfuerzos, se clasifican en encofrados “a una cara” y “a dos caras”. Los primeros son aquellos en los que, o bien las dos caras encofrantes se unen por tirantes, o no existe una de las dos caras. En el caso de los encofrados “a dos caras”, las presiones del concreto se absorben por tirantes internos que atan las dos caras encofrantes.
Además, en cuanto a encofrados verticales de grandes alturas, se utilizan los trepantes o autotrepantes y los deslizantes. Los primeros son estructuras de soporte de encofrado que, mediante soluciones hidráulicas y mecánicas, que se elevan sin necesidad del empleo de una grúa.
Una de las ventajas del sistema trepante es que no necesita apoyarse del suelo. Es ideal para la construcción de estructuras verticales de gran altura en un proceso escalonado. El gerente general de Jade Consulting anota que estos sistemas son de especial importancia “porque determinan la sectorización en altura de este tipo de proyectos, que no logramos obtener con otro tipo de tecnología”.
En tanto, el sistema de encofrados deslizantes consiste en un molde de poca altura, capaz de configurar una sección de concreto vertida en él de forma constante y a la misma velocidad que se eleva dicho molde. Este sistema de encofrado se utiliza preferentemente en obras de gran altura, sección constante o que tiene altura y espesores ligeramente variables.
Por otro lado, la empresa Peri Peruana resalta que los encofrados son polifuncionales. “Dependiendo de la dimensión, necesidad, restricciones y complejidad de la obra es que se les recomienda a los clientes un tipo específico de sistema a utilizar”, explica. “Ello, por su puesto, gracias a la amplia experiencia que tiene la empresa y cuyo ámbito de acción abarca los segmentos de edificación, infraestructura e industria”, agrega la empresa.
Indica que los encofrados utilizados para estos proyectos deben ser de materiales resistentes a alta cargas, versátiles y seguros. “En proyectos CAPEX más que rotación de los encofrados se busca sistemas eficientes, es decir que cubran mayor área, flexibles, que puedan ser trasladados con grúa y de menor cantidad de accesorios. De manera que encontremos la eficiencia de la mano de obra y horas hombre”, añade.
Recomendaciones para un empleo eficiente de los encofrados
Los proyectos mineros son muy complejos y esta complejidad implica diferentes variables que se deben tomar en cuenta, con el fin de que el uso de los encofrados sume productividad al proyecto integral. Según Peri Peruana, para elegir adecuadamente los encofrados adecuados se debe tener en cuenta el número de usos que se les dará, el acabado deseado, la disposición y la forma de trabajo.
Asimismo, por su parte, el Ing. Jiménez sostiene que es esencial la capacitación técnica y actualizada del personal laboral que se encargará de instalación de los encofrados. “Como nosotros (empleados y técnicos) de construcción no contamos con formación en Tecnología Aplicada al Concreto, es primordial llevar capacitaciones técnicas de las soluciones a usar en el proyecto. De este modo se podrá ser eficiente tanto en el uso como en el control de los mismos”, remarca el especialista.
También explica que no todas las empresas de encofrados pueden resolver estructuras de concreto armado de grandes dimensiones como un intercambiador de calor o un chancador primario. Por ello, advierte la importancia de que el proyecto minero cuente con el respaldo de empresas que cumplan con un soporte técnico fuerte y que hayan desarrollado sistemas que ayuden a resolver retos como grandes alturas y presiones de concreto fresco.
Retos
De acuerdo con Peri Peruana, el ritmo de demanda de los encofrados sigue al ciclo de los precios de los minerales, los cuales gatillan proyectos de inversión, ya sea en nuevas infraestructuras o en ampliaciones. También resalta que hay proyectos que están por iniciarse, pero por temas diversos no terminan de concretarse. “Sin embargo, nuestros sistemas son polifuncionales por lo que se pueden utilizar en otros proyectos que necesiten de soluciones de andamios y encofrados”, comenta.
Añade que otro punto importante es el uso de nuevas tecnologías en las obras. “En Peri trabajamos en un entorno colaborativo por medio de modelos BIM, desarrollamos soluciones en realidad aumentada a través de nuestra App, así como utilizamos la realidad virtual para mayor interacción del cliente. Hacemos renderings, códigos QR y buscamos colaborar con los clientes en la búsqueda de eficiencias compartiendo archivos en la nube”, manifiesta la empresa.
“Por ello, una vez ganado el proyecto, es el área de operaciones quien tiene la responsabilidad de ejecutar el servicio, y para ello contamos con tres equipos de apoyo: gestión del servicio al cliente, gestión logística y gestión de materiales. Asimismo, contamos con el apoyo de los gestores de obra, quienes son profesionales asignados de forma exclusiva a proyectos complejos, buscando participar de forma conjunta con la planificación de recursos hacia adelante”, añade.
El Ing. Jiménez considera dos los grandes retos que se deben afrontar al desarrollar estructuras de grandes dimensiones requeridos en los proyectos mineros. Estos son la presión de concreto fresco y las grandes alturas. Según el especialista, el uso de concreto autonivelante, las bajas temperaturas y otros factores hacen complicado el uso de los encofrados industrializados, lo cual puede ser resuelto por empresas con experiencia en estas soluciones.
Asimismo, indica que el asunto de las grandes alturas es un reto incluso más importante porque implica aspectos técnicos y de seguridad, “como plataformas provisionales de trabajo al momento de sectorizar en altura una estructura, que me sirva para aplomar los sistemas de encofrado vertical y plataformas de trabajo para la seguridad de las personas”.